¿Por qué el padel no es un deporte olímpico?
El éxito del pádel es indiscutible y el número de jugadores que cada día se suman a este deporte no para de crecer. Sin embargo son algunos los requisitos que el padel todavía no cumple y por los que sigue sin ser una disciplina olímpica. Con la próxima celebración de los juegos de Río cada vez más cerca te contamos el porqué el padel todavía no es un deporte olímpico.
¿Qué requisitos ha de reunir un deporte para ser olímpico según la Carta Olímpica?
El padel es un deporte joven que cuenta con apenas unas décadas de vida sin embargo su expansión ha sido increíble y cada vez son más los jugadores que se unen a la fiebre. Dado su gran crecimiento y éxito son muchos los que se preguntan ¿por qué el padel no es un deporte olímpico? Según la Carta Olímpica son varios los requisitos que se han de incluir:
- Tener una federación internacional que haya sido aprobada por el Comité Olímpico y que adopte su código ético. Este organismo deberá establecer las normas internacionales, crear campeonatos y ser en definitiva el órgano encargado de supervisar y gestionar la disciplina a nivel internacional.
- Cumplir el Código Mundial Antidopaje para evitar el dopaje en el deporte y en caso de encontrarse algún caso, castigarlo convenientemente.
- Su práctica ha de estar extendida en un mínimo de 75 países y 4 continentes por hombres y en al menos 40 países y 3 continentes por mujeres.
¿Por qué el padel no reúne los requisitos para ser un deporte olímpico?
Los requisitos planteados en la Carta Olímpica parecen alcanzables para un deporte como el pádel. Sin ir más lejos, este deporte ya cuenta con una federación internacional que organiza torneos y en cuanto al plan antidopaje, por norma general los deportes ya cuentan con estrategias para frenarlo y castigarlo y en el World Padel Tour se ha realizado en algún campeonato controles de este tipo.
La dificultad parece residir entonces en el último punto. Es cierto que la expansión del padel ha sido increíble y en países como España o Argentina su práctica es muy habitual. Sin embargo, su auge en algunos puntos geográficos contrasta con su ausencia en otros muchos otros países. El hecho de que sea un deporte joven juega en su contra y su internacionalización total todavía no se ha producido. La organización de exhibiciones y otros eventos en distintos puntos del globo y su incursión poco a poco en nuevos países facilitará que este se vaya extendiendo pero por el momento no se ha producito. No parece descabellado que dado el amplio número de aficionados que ha conseguido en tan poco tiempo el padel pueda conquistar en corto plazo el límite que impone la Carta Olímpica. Para ellos los organismos internacionales han de seguir trabajando y esforzándose por llegar cada vez a más países. Además jugadores profesionales como la reciente campeona de la marca Dunlop Patty Llaguno y su compañera de HEAD Eli Amatriain, entre otros, han manifestado numerosas veces su deseo de participar y ayudan en su internacionalización para alcanzar estos objetivos.
Sin embargo, con estos requisitos solo no bastaría para incluir al padel como deporte olímpico pues el COI ha establecido una nueva norma que limita el número de disciplinas participantes en los Juegos Olímpicos en 28 deportes, 300 pruebas y 10.500 participantes. Y aquí esta el punto más complicado de conseguir pues existen numerosas disciplinas que luchan por entrar en la lista pero son pocas las que salen de ella. Por lo tanto el pádel tendría que esperar a que alguna disciplina fuese eliminada y tener una propuesta más seria que el resto de candidatos.
Los Juegos de Río se aproximan con la ya absoluta certeza de que no será en esta edición cuando veamos al padel como deporte olímpico, tampoco ocurrirá en los de 2020 pues para inscribir un deporte en los Juegos Olímpicos se ha de hacer en los siete años anteriores a su celebración, pero los amantes de este deporte seguiremos luchando para ver al padel como disciplina olímpica.